El fallo de la Corte de Apelaciones de Nueva York que suspendió la orden de entregar las acciones de YPF fue recibido en Wall Street como un «respiro enorme» que trae «tranquilidad» al Gobierno, especialmente en la antesala de las elecciones legislativas. Analistas financieros destacaron que la decisión le da a Argentina un valioso margen de maniobra.
Según un análisis de la corresponsal en Washington de Clarín, Paula Lugones, la decisión judicial es positiva en el contexto de la volatilidad financiera y fue influenciada por el apoyo del gobierno de Estados Unidos a la postura argentina, un factor que los expertos consideran clave para el resultado.
Más allá del alivio financiero, los especialistas consultados por el matutino porteño coincidieron en que el Gobierno tiene ahora una potente herramienta política para usar en la campaña electoral, apuntando directamente contra el kirchnerismo y la figura de Axel Kicillof.
Si bien la decisión de la Corte no resuelve la cuestión de fondo sobre la condena de 16.100 millones de dólares, se percibe como un éxito para la defensa argentina, ya que permite discutir la apelación sin la amenaza inmediata de perder activos estratégicos.
